Llega el otoño y con él, las calabazas de diferentes colores, tamaños y sabores. Como es una de mis hortalizas favoritas, junto con los boniatos, en esta época del año suelo comer calabaza casi todos días, en salteados, guisos, asada, en pasteles, sopas, cremas, y un largo etcétera. ¡Me encanta!

Si tengo que elegir formas de comerla, una sería al horno y otra en crema, y, a veces, decido no elegir y combino las dos, hacer una crema con calabaza horneada es una delicia. ¿Lo has probado alguna vez? La receta que quiero compartir contigo para una estupenda cena de otoño es sencilla, rica y relajante.

Si te parece, te cuento cómo preparo esta crema de calabaza con sabor a otoño.

Ingredientes:

• 500 g de calabaza
• 100 g de castañas deshidratadas
• 2 zanahorias grandes (250 g)
• 1 cebolla morada (sustituir por cualquier variedad que sea dulce)
• Aceite de oliva virgen extra
• 1 pizca de sal marina sin refinar
• Agua filtrada para cubrir las verduras

Elaboración:

1. Cortamos la cebolla en plumas y reservamos, cortamos las zanahorias en cuadraditos (no pelar si son bio) y reservamos. Por último, pelamos y cortamos con cuidado la calabaza en trozos un poco más grandes, reservamos.
2. Las castañas las ponemos en remojo la noche anterior para que se hidraten, queden blandas y listas para usar.
3. En una cacerola de fondo grueso, ponemos 2 o 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra, una vez que está caliente, añadimos la cebolla y salteamos hasta que este pochada (su aspecto es transparente brillante), añadimos las castañas, las zanahorias y la calabaza, rehogamos unos minutos y añadimos agua filtrada, si es posible, sin llegar a cubrir la verdura.
4. Tapamos y cocinamos a fuego vivo durante unos 25 o 30 minutos, y comprobamos que la verdura está tierna.
5. Añadimos sal y aceite de oliva o de coco en crudo, y batimos enérgicamente a máxima potencia.
6. A mí esta crema me gusta con una textura densa, casi como de puré, por eso no la cocino con mucha agua, si la preferimos más líquida, añadiremos más agua, o caldo de verduras o leche vegetal sin azúcar.
7. Servir en el recipiente elegido, recomiendo tomar caliente.

Nota: Esta crema la podemos cocinar sustituyendo la cebolla por jengibre fresco y no añadir castañas si no queremos, o sustituirlas por almendra tostada molida.

Utilizo cualquier variedad de calabaza, lo importante es que sea dulce. Me gusta mucho la calabaza del cielo, porque siempre suele salir dulce.

Algunas de las bondades nutricionales de la calabaza son su aporte en fibra y en vitaminas, principalmente vitamina C, importante fuente de carotenos, que nos proporciona antioxidantes, gracias a los cuales neutralizamos los radicales libres, previniendo y ralentizando de esta forma la aparición y/o desarrollo de algunas enfermedades.