En el anterior artículo hablamos de qué es una harina y los tipos de harinas de cereales sin gluten. En este artículo hablaremos de las harinas obtenidas de frutos secos, semillas y de las legumbres más comunes. Estas harinas también están exentas de gluten.
Harinas de frutos de secos y semillas:
Harina de castañas: aporta un aroma y sabor muy dulce y delicioso, ideal para repostería y elaboración de panes, también la podemos usar como espesante sopas y guisos. Es rica en nutrientes.
Harina de almendras: Aporta un aroma y sabor dulce muy agradable, ideal para repostería y elaboración de masas y panes; también la podemos usar como espesante sopas y guisos. Es rica en nutrientes. La conseguimos moliendo directamente las almendras (en un procesador de alimentos o robot de cocina).
Harina de lino o chía: estas harinas se utilizan principalmente como sustituto del huevo tanto en recetas dulces (magdalenas, bizcochos, galletas, etc.) como saladas (masas, panes, rebozados). La harina se consigue moliendo las semillas con un molinillo de café. Por cierto, te recomiendo que muelas únicamente las semillas que vas a utilizar, porque éstas son ricas en ácidos grasos omega 3 y 6, y pueden enranciarse con facilidad.
Harinas de legumbres:
Harina de garbanzos: podemos usar la harina de garbanzos principalmente en rebozados y para elaborar tortilla de patatas sin huevo. Se utiliza para masas, panes y repostería, y normalmente en sinergia con otras harinas sin gluten. Es proteica, nutritiva y saciante.
Harina de guisantes: una harina que va a aportar un color verde a aquellas preparaciones en las que la utilicemos. Podemos usar harina de guisantes para espesar purés, guisos, para hacer tortitas o crepes salados, masas para pizzas, empanadillas, galletas saladas, etc. Es una harina proteica y muy rica en nutrientes.
Harina de lentejas: es típica de la cocina india en la elaboración de masas y panes planos, y se usa para rebozados. Es proteica, nutritiva, saciante y de fácil digestión.
Harina de chufa: aunque esta harina proviene de un tubérculo, quiero hacer mención de ella, ya que me resulta muy interesante en la repostería sin gluten y apta para diabéticos. Tiene un sabor y aroma muy agradable que combinan muy bien con el limón y la canela. La chufa es también muy saciante, nutritiva y de fácil digestión.
Hasta aquí lo referente a las harinas de frutos secos y de legumbres.
En mi taller de panes y masas sin gluten del día 29 de noviembre pondremos en práctica elaboraciones de masas y panes sin gluten utilizando diferentes harinas de las que hemos hablado en este artículo. Aquí te dejo el enlace para que puedas reservar tu plaza.
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