¿Hacemos pizza crujiente? yo soy de pizza de masa fina. En mis talleres enseño a hacer pizzas con diferentes harinas, pizza de masa fina, de masa gruesa y pizza con masa madre. Todas muy ricas, para gustos, los colores. Esta receta de pizza la comparto, en parte para que mis alumnos tengan otros recursos diferentes a los que vemos en clase y también para ti, en agradecimiento por la confianza que pones en Jardín de Luna.

Para que esta pizza te quede crujiente, te voy a dar una serie de consejos. El primero, es que la masa la cocinamos sola durante unos 15 minutos, y el segundo consejo y muy importante, es que vamos a evitar utilizar salsas liquidas. Si quieres hacer salsa de tomate casera, escúrrela todo lo que puedas, o redúcela al máximo y, si aun así, estuviera ligeramente liquida, añade un aguacate para densificarla. Otra opción sería utilizar cremas densas, como puede ser un pesto, hummus, babaganous, etc, y luego se rellena normal con ingredientes escurridos.

• 150 g de quinoa en grano/ sustituible por trigo sarraceno
• 4 cucharadas de cerveza sin gluten o bien agua (60 ml)
• 1 pizca de sal marina
• 1 cucharada de orégano o romero seco (según gustos)
• Salsa de tomate casera con aguacate y orégano
• Cebolla cortada fina con mandolina
• Calabacín en rodajas finas cortadas con mandolina
• Chorizo casero de León
• Mozzarella fresca rallada

Elaboración:

1. Lavamos la quinoa o el sarraceno con agua fría y la dejamos en remojo en un bol con agua unas 8 horas.
2. Transcurrido el tiempo de remojo, enjuagamos y escurrimos el grano con un colador. Lo colocamos en el vaso de la batidora junto con el resto de ingredientes y trituramos muy bien, hasta conseguir una masa homogénea y sin grumos. Dejamos reposar 15 minutos.
3. Cubrimos con papel vegetal la bandeja del horno y lo barnizamos con aceite de oliva con la ayuda de una brocha, extiéndelo bien por toda la superficie.
4. Precalentamos el horno a 200ºC calor arriba y abajo.
5. A pesar de tener nuestra masa ligeramente líquida empezamos a colocarla cubriendo toda la superficie del papel engrasado con el objetivo de hacer una pizza rectangular, con el horneado desaparece la humedad y tendremos como resultado una masa compacta y crujiente.
6. El secreto esta en extender bien la masa ayudándonos con una espátula o lengua de silicona, sin dejar huecos sin cubrir y lo más homogénea posible.
7. Una vez que tenemos el horno a 200ºC metemos la masa y horneamos durante unos 15 minutos a 180ºC. Pasado el tiempo sacamos la masa, y con cuidado la despegamos del papel y la damos la vuelta, colocamos los ingredientes elegidos y horneamos 10 minutos más, en los últimos cinco minutos añade queso al gusto y gratina 5 minutos estando atenta que no se queme el queso.
8. Sacamos del horno y la dejamos que se temple ligeramente y, ya solo queda disfrutar.

¡Espero que te guste!