En esta ocasión preparé comida natural, nutritiva, elaborada de forma sencilla, sin maquillajes, favoreciendo que el fluir de nuestra energía se fusionara con el fluir de la energía del entorno en el que estábamos. El grupo estuvo trabajando el contacto físico y las relaciones humanas, necesitaban bajar esa energía a lo terrenal, con lo que la presencia de verduras de raíz, proteína de origen vegetal y animal, y buscar el dulce natural fue la base principal para trazar el menú del retiro.
