Con tan solo este plato de trigo sarraceno, verduras y algo de tempeh, vas a sentirte completamente nutrido. El trigo sarraceno es un cereal de invierno, tiene la capacidad de calentarnos profundamente, y aunque su sabor es más bien neutro, con el salteado de las verduras y la salsa tamari (y si deseamos añadirle tempeh macerado) conseguiremos un sabor exquisito y equilibrado, para que en estos días de frío no nos falte ni energía ni calorcito.

Ingredientes:

• 180 g de trigo sarraceno
• 350 ml de caldo de verduras (se puede sustituir por agua filtrada)
• 3 cucharadas de aceite de coco
• 3 zanahorias
• 1 brócoli pequeño (o coliflor)
• ½ cebolla
• 1 pimiento rojo pequeño
• 1 cucharada de pipas de girasol
• 1 cucharada de aceite de oliva
• 1 pizca de sal
• ½ cucharadita de cúrcuma
• 2 cucharadas de tamari/ 2 cucharadas de agua
• 1 pizca de pimienta en grano recién molida
• Tempeh macerado (opcional)

Elaboración:

1. Pesamos el cereal, lo lavamos con agua filtrada hasta que esta salga limpia, y lo dejamos en remojo en un bol con esa misma agua durante cuatro horas.
2. Para cocer el trigo sarraceno, lo enjuagamos, y una vez escurrido, lo ponemos en una olla a fuego medio, y lo vamos calentando y removiendo de vez en cuando hasta tostarlo ligeramente, teniendo cuidado para que no se queme.
3. Añadimos una pizca de sal, y el caldo de verduras o el agua (si puede ser caliente, mejor), lo llevamos a ebullición, bajamos el fuego al mínimo y cocinamos hasta que el agua se haya consumido (quince o veinte minutos).*
4. Una vez que tenemos el trigo cocinado, lo retiramos del fuego, lo servimos en los platos y reservamos. Si no queremos que siga reblandeciéndose o lo vamos a almacenar en la nevera, lo refrescamos con agua filtrada para cortar la cocción y lo pasamos a un envase de cristal.
5. Mientras se cocina el trigo sarraceno, en una sartén calentamos el aceite de coco** y salteamos la cebolla durante cinco minutos, añadimos la pizca de sal, la cúrcuma en polvo, el pimiento y la zanahoria cortaditos, y el brócoli en arbolitos pequeños, y salteamos las verduras a fuego vivo (tipo wok), con lo que mantendremos el color y el sabor intactos, y una textura al dente. No dejaremos de mover la sartén para que no se pegue, y bajaremos el fuego si es necesario.
6. En un vaso, preparamos dos cucharadas de tamari o salsa de soja (sin azúcar y libre de gluten, si es posible), lo mezclamos bien y rápidamente se lo añadimos a las verduras y acto seguido tapamos la sartén. Movemos la sartén con la tapa puesta durante un minuto.
7. Destapamos, y si nuestras verduras están cocinadas, las retiramos y servimos junto con el trigo sarraceno.
8. Si optamos por añadir un poco de tempeh a nuestro plato, podemos cocinarlo junto con las verduras, o en la misma sartén, una vez retiradas estas, añadimos unas gotas de aceite de coco y lo sellamos a fuego alto durante unos minutos. Lo retiramos, lo troceamos al gusto y lo añadimos sobre las verduras.
9. Podemos aliñar el plato con unas gotas de tamari***, aceite de oliva y moler pimienta negra al momento.
10. Acompañar de brotes verdes (rúcula, canónigos, berros), germinados, medio aguacate troceado, o unas cucharadas de chucrut.

* Los cereales se pueden cocinar de dos formas diferentes:

1. Calentando el cereal en la olla hasta tostarlo y luego añadiendo el líquido (caldo de verduras o agua filtrada), como yo he propuesto en la receta (con este procedimiento conseguimos que el cereal sea más digestivo).
2. A la inversa, calentamos la cantidad de agua o caldo correspondiente, y una vez que ha hervido, añadimos el cereal.

** Podemos saltear las verduras con otro aceite (sésamo, oliva, o el que tengamos a mano), aunque el coco le da un toque exótico al plato.

*** El tamari es opcional, si no lo tenemos se sustituye por dos cucharadas más de agua y una pizca de sal.

En solo cinco minutos

Este plato de trigo sarraceno con verduras se puede preparar en solo cinco minutos, si tienes un fondo de nevera ya preparado. Solo tienes que coger el envase del cereal ya preparado, unas cuantas verduras ya salteadas y poner la ración que vas a tomar a calentar suavemente en la vaporera. Mientras, puedes optar por saltear unas tiras de tempeh ya macerado, para añadir luego sobre las verduras.

Taller de «Cocina tu menú semanal en 3 horas (edición de invierno)»

Si vas a tomarlo en el momento de cocinarlo, haz raciones extras, tanto de verduras como de cereal, y guárdalas en recipientes en la nevera. Ve consumiéndolo durante la semana y haciendo diferentes combinaciones, variando los ingredientes según el día y tus necesidades.

Con un buen fondo de nevera, organizarse en la cocina es muy fácil, solo estarás allí el tiempo justo para prepararte aquello que más te apetezca cada día y listo. ¡El resto es pan comido!

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